“El grupo Puente tiene un relevamiento y una organización muy precisa. Hace tiempo que deberían tener la autorización para cruzar la frontera, con sólo las dos dosis de la vacuna. La integración y los vínculos familiares deben ser la prioridad”, resaltó el jefe comunal de Concordia.
Pese a distintos anuncios realizados en los medios en los últimos días, los ciudadanos con vínculos familiares estrechos en Salto, todavía no pueden cruzar el río. Acumulan así más de un año y medio separados en principio por la pandemia, y ahora por demoras burocráticas en la autorización.
“Él Grupo Puente tiene un trabajo de organización muy minucioso, con sólo presentar el certificado que se les aplicó las dos dosis de la vacuna contra el Covid, debe bastar para que puedan reencontrarse con sus familiares o retornar a sus trabajos”, consideró el intendente Alfredo Francolini.
“No se trata de turistas o viajeros ocasionales”, explicó y reiteró que “son personas que necesitan reencontrarse con sus familiares. Es una cuestión humanitaria”.
Para finalizar, insistió en que “este problema se debe solucionar inmediatamente, hace mucho tiempo que estas familias están esperando una respuesta. Tanto Salto como Concordia tenemos una situación sanitaria muy buena, hoy es el momento de agilizar las cuestiones burocráticas y resolver este problema que afecta a más de 300 personas”, enfatizó.
