El director de Análisis Normativos y Estudios Especiales del Ente Provincial Regulador de la Energía (EPRE), Luciano Paulin, explicó que "las auditorías que nosotros hicimos en los primeros meses del 2020, cuando comenzó a regir el ASPO (Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio) en la pandemia, nos arrojó que el índice de cobrabilidad rondaba el 92%".
En diálogo con Diario Río Uruguay, el profesional recordó que ya en pleno aislamiento, "nosotros tuvimos momentos en donde las distribuidoras nos acusaban un índice de cobrabilidad que - con suerte - llegaba al 35%".
"La gente, en esos primeros tres meses del ASPO, dejó de pagar la factura de luz", ilustró.
Consumos
En ese sentido, Paulin explicó que el nivel de consumo seguía siendo "el mismo, porque si bien la gente se la pasaba en sus casas, las fábricas e industrias - es decir, los grandes consumidores de energía eléctrica - estaban cerradas". Vale decir, "la pandemia cambió el tipo de consumo pero no la cantidad", explicó.
Recupero
Por último, el funcionario del EPRE detalló que "ya en agosto/septiembre pasado, cuando empezamos a entrar en el DISPO (Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio), automáticamente saltamos de ese 35% a un 75% en el índice de cobrabilidad".
Ya en los comienzos de este 2021, "podemos decir que estamos arriba de un 90%; es decir que recuperamos el índice de cobrabilidad y estamos en los mismos niveles que en la pre pandemia", remató.
