Alfredo Francolini explicó que durante el fin de semana – y en el medio de las reuniones con el COES local – “me llamó la vicegobernadora Laura Stratta, quién está a cargo del Ejecutivo provincial, y me preguntó que opinábamos acerca de la situación en Concordia”.
En contacto con Diario Río Uruguay, el mandatario recordó que tras varias deliberaciones “se resolvió pedirle la suspensión al Ejecutivo provincial de la presencialidad de las clases”.
En ello influyó la “cantidad de burbujas pinchadas, junto con la cantidad de docentes y estudiantes aislados y contagiados que teníamos”, comentó. Subrayando que, en ese momento, “había 2 mil personas aisladas por esas burbujas pinchadas”.
Lucha de clases
Respecto al dictado de clases en institutos u otras instituciones, Francolini citó que el decreto último engloba a todo lo que es “instituto de idiomas, de danza, pilates, etc…”, incluido “también la actividad religiosa, que se puede hacer solo en modalidad virtual”.
Es decir, suspendido “todo lo que supone aglomeración de personas, pero sí se puede hacer en modo virtual”, mencionó.
Protestas
Por último, el intendente de Concordia se refirió a la protesta realizada el domingo, en su domicilio particular. “Hay gente molesta, que no entiende la situación que estamos pasando pero esto es algo que no elegimos”, puntualizó.
En ese sentido, Francolini citó que “hay gente que se nos está yendo todos los días y queremos frenar eso”. Subrayando que “la gravedad de esta segunda ola no respeta alguna edad determinada como en otro momento”.
